jueves, 29 de enero de 2009

Lobo Estepario

[Yo, lobo estepario, troto y troto, la nieve cubre el mundo, el cuervo aletea desde el abedul, pero una liebre nunca, nunca un ciervo. ¡Amo tanto a los ciervos! ¡Ah, si encontrase alguno! Lo apresaría entre mis dientes y mis patas, eso es lo más hermoso que imagino. Para los afectivos tendría buen corazón, devoraría hasta el fondo de sus tiernos perniles, bebería hasta hartarme de su sangre rojiza, y luego aullaría toda la noche, solitario. Hasta con una liebre me conformaría. El sabor de su cálida carne es tan dulce de noche. ¿Acaso todo, todo lo que pueda alegrar una pizca la vida está lejos de mí? El pelo de mi rabo tiene ya un color gris, apenas puedo ver con cierta claridad, y hace años que murió mi compañera. Ahora troto y sueño con los ciervos, troto y sueño con liebres, oigo soplar el viento en noches invernales, calmo con nieve mi garganta ardiente.

Herman Hesse
El Lobo Estepario, 1928

Estamos juntos

[Lo que debes recordar es que si todos estamos solos,
también estamos juntos en eso]

Patricia. P.S. I Love You, 2008